A los ciudadanos que marcharon por la democracia: ¿En dónde estaban?
¿En dónde estaban? Cuando en el 2014 asesinaron estudiantes, cuando en el 2012 nos lanzaron gas lacrimógeno; cuando en 2011 se marchó contra el narcotráfico; ¿en dónde estaban cuándo la guardería ABC se incendió? Pero, sobre todo, que nos digan ¿en dónde estaban cuando Felipe Calderón inició la guerra contra el narcotráfico en 2008? Esa que dio como resultado el aumento del 200% de muertes ligadas al narcotráfico, cuando los daños colaterales éramos los hijos que no le importaban al gobierno PANistas.
La gran mayoría, y se los apuesto, estaban cegados por sus privilegios, mientras el pueblo de a pie no tenía de otra que aguantar, aguantar y aguantar. La marcha “por la democracia” es una broma por su mismo origen inconsistente, que no sabe redactar ni un pliego petitorio, que no sabe ni siquiera qué es lo que peligra, pero le pone un nombre, y ese es “la democracia”, concepto vacío en sus bocas hipócritas.
Y sí, muestro mi indignación y enojo, porque los que hoy dicen que no hay democracia, son los que hace 6 y 12 años nos decían “huevones” por ir a marchar, sí, estoy enojado, porque cuando yo me manifesté recibí golpes de policías, gases lacrimógenos en mi cara y tuve compañeros que fueron presos políticos. Estoy indignado porque se dicen censurados, pero lo único que saben hacer es tener diarreas de opinión, inundadas de clasismo y aporofobia. Sí, estoy indignado con ustedes, marchantes de rosa y blanco, porque no se aceptan pueblo sino “ciudadanos” y por ello creen tener un mejor estatus social e intelectual, aunque tengan un payaso por historiador llamado Enrique Krauze, quien compara su enojo chiquito con el movimiento estudiantil del 68.
No somos iguales, y en eso tienen razón, ¿Quién quiere de nuevo al viejo régimen? ¿Quién quiere la política rancia que representan sus voceros? ¿Quién quiere a lo más podrido del sistema político mexicano? Yo, no, y por eso, no somos iguales. Nosotros sí tenemos dignidad.
Diego Alejandro Nájera Mora