El Pemex de antes y de hoy





Una de las grandes deudas históricas que el Estado mexicano tiene, es con Pemex, empresa que desafortunadamente sirvió para enriquecer descomunalmente a políticos corruptos neoliberales, algunos viviendo en E.U. por miedo a la cárcel si regresan a suelo mexicano, mismos que no tenían visión de perpetuidad de campos petroleros para futuras generaciones, ni la visión ideal de una empresa de hidrocarburos, tasas consistentes y maximización de la renta petrolera. Dichos políticos corruptos del PAN y PRI principalmente, sin importar el daño al erario público, actuaron y cabildearon en la cámara de diputados federal a favor de trasnacionales como Odebrecht.


De lo anterior, surgen dos actividades que aportaron al deterioro financiero de Pemex en los últimos 35 años, en primer lugar, impulsado por la reforma del 2008 el sexenio de Calderón direccionó la atención en aguas profundas en el mar, creando dos instalaciones para extraer petróleo crudo a un nivel de 800 metros de profundidad, pero ambas, no obtuvieron ni un solo barril de petróleo. En aguas de 500 metros de profundidad los resultados son negativos, ya que del 2004 al 2012 existieron 28 proyectos en aguas mayores a 500 metros, de los cuales 16 fracasaron debido a que se secaron, no están con madurez suficiente, o el aceite es muy pesado.


La segunda actividad fue extraer todos los barriles de petróleo crudo posible en las cuatro regiones petroleras que tiene el país, para cobrar el mayor número de impuestos de las ventas en importación, dejando de lado cuestiones que hoy en día si se atienden, como solo extraer el crudo necesario solo para cubrir la demanda de gasolina nacional, de hecho, en la actualidad se busca cubrir la demanda nacional de gasolina con un aproximado de 2,000 millones de barriles diarios de crudo producidos, buscando con las dos refinerías nuevas del sexenio, transformar el petróleo crudo en gasolina dentro del país y no depender de la gasolina del extranjero.


Pero en la era neoliberal en el 2003 por ejemplo con el ex presidente Fox, se dio la producción de petróleo más grande registrada en la historia de Pemex 3,371 millones de barriles diarios, impulsado principalmente por el último pico productivo de Cantarell en el menospreciado sur del país, sobrepasando el nivel nacional de necesidad en barriles de petróleo crudo, se observó entonces una intensidad en la captación de contribuciones que anteponía los ingresos de corto plazo, para cobrar el máximo de impuestos posibles y beneficiar al gobierno federal en turno, con Calderón para el 2008 fue lo mismo, se llegó a 2,792 millones de barriles diarios, sin embargo, beneficios para el país visibilizados por la extraordinaria venta de esa cantidad de barriles diarios, no hubo.


Este saqueo que deteriora las fianzas de Pemex se agrava los dos últimos sexenios antes de AMLO, con Calderón en el año 2008 se brindan atribuciones de gestión autónoma para que la Comisión Reguladora de Energía genere deuda con mayor facilidad y genere modificaciones en reglamentos internos, y en el sexenio de Peña Nieto se llegó a modificar la constitución para tener contratos con particulares y eliminar la petroquímica básica, como línea estratégica de la federación, aunado a que se utilizo a entidades como el Conacyt que reciben dinero directamente de Pemex mediante un tipo de impuesto cobrado a la empresa llamado “Derecho para la investigación científica y tecnológica en materia de energía (DEFIPE)”, para involucrarlos en desarrollar tecnología para salsa en polvo para pizza y pastas, que beneficiaría a empresas privadas como “Impulsora de proyectos productivos S.A. de C.V.”, empresa beneficiada de la salsa para pizza realizada por el Conacyt.


Por lo tanto, es indispensable impulsar gobiernos progresistas de izquierda que detengan el deterioro financiero de las fuentes de ingreso del país que provoco la derecha neoliberal, como bien lo ha hecho el gobierno de México con Pemex en el sexenio de AMLO, mediante la aportación directa de capital, el cobro menor de impuestos para cubrir necesidades de inversión y salariales, recuperando la producción de petróleo crudo a niveles eficientes para la nación y atacando la corrupción en niveles históricamente intocables.


Oscar Tajín Reyes Marín