El poder Judicial como precursor del crimen organizado



Ahora que se están desarrollando los temas sobre los excesos del poder judicial respecto al erario público, no podemos dejar atrás un tema tan importante. ¿Quién imparte la justicia?, según las estadísticas, ¿los criminales son castigados o liberados?, ya que, a través del influyentísimo del poder económico de la derecha en el poder judicial, muchos presuntos criminales han obtenido su pase de lista hacia la libertad.

A sabiendas de la falta de actuación de nuestras autoridades, el problema no radica en su captura, el problema viene en lo más laborioso que son los juicios y dictar sentencia, aprovechándose de los vacíos de la ley y con el siempre “fallas en el debido proceso”, obtiene su libertad sin problema alguno.


Tal es el caso del procurador de Morelos Uriel Carmona, el cual tiene denuncias por el fiscal anticorrupción por nexos con el crimen organizado. El cual después de su detención los ministros fallaron a favor del mismo logrando así su liberación ya que el señor contaba con fuero y su única forma de ser juzgada es a través de un juicio Político.


Y sin mencionar que corrieron de su puesto al fiscal anticorrupción que hizo la denuncia correspondiente.


Los delitos como daños al erario y malversación de fondos públicos que son cometidos por políticos, mismos que son declarados abiertamente de derecha, sin escrúpulos, sin pertenencia histórica, sin humanismo y sin visión social de bienestar, sintiéndose intocables por un país que por la cercanía a E.U. puede considerarse, echo a modo para pequeñas elites de grupos de interés de poder económico tan inmenso como las marcas que representan, petroleras, mineras, farmacéuticas.


De lo anterior se desprende la eliminación de fideicomisos al poder judicial, mismos que están hoy en día a la luz de la opinión pública y que puede representar una única oportunidad, en la que México tenga el poder a través de las mayorías en las cámaras, de cambiar la impartición de justicia y que esta no sea para ofrecer la libertad al mejor postor, ya que en México se grita justicia en los oídos sordos de los magistrados y cómplices de la justicia podrida den México.


Carlos Daniel Hernández