La carencia de glitter morado en las costillas del Senador por Nuevo León, deja ver que la violencia machista jamás será un acto “cómico”. Ni en palabra o acción
Hace unos días en redes sociales el senador por Nuevo León Samuel García, se volvió tendencia en la plataforma Twitter, y esta vez no fueron sus viajes lujosos alrededor del mundo o su boda con Mariana Rodríguez en medio de la Fase III de la pandemia por COVID-19 en el mes de abril.
Cabe mencionar que durante marzo su pareja fue víctima de palabras anti sonantes por parte del senador, donde la insulto y falto al respeto.
Pero en esta ocasión sus comentarios machistas, misóginos y retrogradas fueron durante una transmisión en vivo, donde se encontraban en una videollamada con Mariana, ambos deleitando unas costillas, y la posición de ella ante la cámara, le disgusto al legislador diciendo lo siguiente:
Samuel García: Súbete la cámara, estás enseñando mucha pierna
Mariana Rodríguez: - ¿Mucha pierna? ¿Nada más era mi rodilla no?
Samuel García: “Sube la cámara, estás enseñando mucha pierna”, insistió.
“Que bajes la pierna, no andes enseñando la pierna”, vuelve a pedir.
“Me casé contigo pa’ mí no pa’ que andes enseñando “, en tono de reclamo...
Por dichas acciones, usuarios de redes sociales mostraron su desprecio e indignación, mientras que, en algunos medios de comunicación tradicionales de nuestro país, hacen un telón cómico de hechos o acciones en contra de la integridad de las mujeres. Aseverando que la forma de vestir o actuar de una mujer, es causal para ser atacada o agredida. O bien, que solo es un simple chiste y broma, que queda a negativas interpretaciones, así de fácil normalizan la violencia de género.
Acerca de datos duros de la violencia contra la mujer en nuestro país, un estudio del INEGI publicado en 2019, revelo que “el 66% de las mujeres mexicanas de 15 años y más, han sido víctimas de violencia o han padecido, al menos, un incidente de violencia en cualquier ámbito y momento de su vida.Sin embargo, el 78% de las mujeres que sufrieron violencia no solicitó apoyo y no presentó una denuncia. El argumento que dieron la mayor parte de estas mujeres (28.8%) fue porque consideraron que se trataba de algo “sin importancia” o no quería lidiar con el procedimiento de denuncia. Un dato histórico es que la relación de poder ha sido en desigualdad entre los sexos, determinando que las mujeres tengan un rol inferior a los hombres en las sociedades. Ya sea en ámbitos académicos, laborales, relaciones interpersonales, tareas domésticas y cuidado de los menores. En este contexto la severa normalización en bromas disfrazadas o chistes machistas, perpetúan un ambiente que vulnere la salud mental, emocional y físico, de mujeres y niños.
Actualmente la ola de violencia de género ha incrementado, en cierta medida por el encierro causado por la pandemia del Covid-19. Donde evidentemente muchas mujeres quedan expuestas ante sus agresores y en vulnerabilidad.
Siguiendo con los comentarios del legislador, recordemos que hace algunos meses diversos colectivos y grupos de mujeres salieron legítimamente a protestar en diversos estados del país, y el senador por Nuevo León en apoyo al movimiento feminista, comento por medio de redes sociales:
“En efecto, el justo reclamo de las mujeres mexicanas por el aumento de los índices de acoso, violencia de género, feminicidios (…) provocaron en el presidente reacciones ilógicas, que lejos de ser útiles a sus propósitos, han aumentado el descontento”.
Curiosamente junto a un grupo de políticos que abiertamente se declaran oposición conservadora, que al igual, que él se sumó al movimiento de mujeres y con ello surgieron más de un ataque al Gobierno del presidente López Obrador por parte de dicho grupo. Pero eso sí, ninguna acción, legislación o propuesta para defender el derecho a una vida libre de violencia para las mujeres del país como representantes de sus respectivos estados y localidades.
Personajes como el senador Samuel García que ha hecho de la carencia de justicia y bienestar de las mujeres un oportunismo político arribista, dejando toda acción y comentario invalido por plena demagogia entre sus palabras y acciones, eso se debería llevar a la reflexión hacía que calidad de servidores públicos tenemos en nuestro país. Pues después de sus repetitivos actos machistas y misóginos, quedaría como un acto porril contra el legítimo movimiento de mujeres que arde en nuestra sociedad por justicia.
Que sea una lección, mas que una llamarada de petate…, a que grado la violencia machista nos ha afectado, como mujeres, como hombres y como individuos dependientes entre nosotros mismos. Por ello la gran necesidad de formación educativa asertiva para un mejor desarrollo cognitivo en la niñez mexicana. Lamentablemente aquí seguirá existiendo una duda en el aire, ¿Acaso Mariana Rodríguez Cantú, estará bien?
Por ello debemos cuestionar antes de cualquier tipo de comentario en base a prejuicios. Es una tarea necesaria la creación de políticas de cuidado para contrarrestar la violencia de género en México, pero también la violencia generalizada por injusticia, desigualdad y hambre que aun permea en nuestro país.
Adriana Pérez Valdez